BÚSQUEDAS en este blog

miércoles, 2 de octubre de 2019

Canciones de amor a quemarropa, de Nickolas Butler

@wiscobutler Nickolas Butler nació en Allentown, Pensilvania, y se crió en Eau Claire, Wisconsin. Es licenciado por la Universidad y el taller de escritores de la Universidad de Wisconsin. Ha tenido diferentes oficios tales como mantenedor en Burger King, vendedor de perritos calientes, guardaespaldas, en una empresa de tele marketing, en una industria cárnica, en un tostadero de café y de dependiente en una licorería entre otros. Cultiva también el relato y la poesía y publica sus textos en diferentes medios con los que colabora. Su primera novela fue «Shotgun Lovesongs», con la que obtuvo cierto éxito y fue traducida a varios idiomas. El libro comentado en esta entrada «Canciones de amor a quemarropa» fue publicado en 2014. En 2017 publicó «Los corazones de los hombres» y en marzo de 2019 ha visto la luz «Little faith». Vive actualmente en una zona rural de Wisconsin con su mujer y sus dos hijos. Más información en su página web.

Amigos desde que eran niños en el (imaginario) pueblo de Little Wing, cercano al (real) de Eau Claire, Henry, Lee, Kip y Ronny son los protagonistas junto con Beth, mujer de Henry, de un relato que desgrana los rumbos diferentes que fueron tomando sus vidas al alcanzar la madurez. Henry y Beth siguen en el pueblo trabajando duro en su granja, Lee es un afamado cantante, Ronny fue un vaquero de rodeo, pero ahora tiene sus problemas con el alcohol y Kip hizo sus pinitos como agente de bolsa. La amistad sigue latente pero las cosas han cambiado mucho y sus reencuentros sacan a la luz viejas historias y emociones que ponen en jaque sus convicciones. El amor y la amistad, la vida cerca de la naturaleza o la vuelta a los orígenes son, entre otros, los temas que conforman este relato. Además del narrador, los protagonistas se van alternando en los capítulos, sin solución de continuidad, contando en primera persona sus sentimientos y sus recuerdos.

Esta novela supondrá el disfrute de aquellos lectores que gusten de las recreaciones del ambiente norteamericano como pudieran ser «Las uvas de la Ira» de John Steinbeck o «Stoner» de John Williams por citar algunos ejemplos, pero será un duro castigo para aquellos a los que no les gusten este tipo de narraciones (americanadas he escuchado a algún lector). Hay muchos temas tratados en un relato en el que hay profusión de descripciones de los sitios y las personas para permitir hacernos una idea completa del ambiente rural y en las historias en primera persona que conforman la psicología de los personajes. La vuelta a las raíces, a un pueblo pequeño perdido, es un asunto constante en la vida de las personas que luchan para salir de él o para volver cuando se han marchado. Es un relato que podía seguir ad eternam o acabar en cualquier momento, como así ocurre sin que pueda decirse que se trata de un final: la trama queda abierta. Personalmente me ha gustado, me ha entretenido, me ha parecido sencilla y por ello conmovedora y mientras he estado sumergido en la historia he revivido parecidos temas en mi propia vida: en los pueblos no pasa nada y pasa mucho al mismo tiempo, siempre se pueden encontrar detalles en la vida cotidiana con sus rutinas de cada día. El estilo narrativo es sencillo a la vez que seductor y nada farragoso. Se llega a conocer a los personajes, pero se intuye que todos tienen mucho más detrás que el lector puede rellenar a su gusto. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

opiniones