lunes, 18 de julio de 2011

Habitaciones Cerradas, Care Santos

Una sugerencia en el momento justo de acabar la anterior lectura ha sido el detonante para conocer y leer este libro, del que no había oído hablar. La joven Violeta, afincada en Estados Unidos y entendida en arte, hereda de su familia un palacete en el Paseo de Gracia de Barcelona y decide convertirlo en un museo dedicado a su abuelo, un cotizado pintor renacentista con una vida plagada de cosas que contar. Durante las obras de reforma, los operarios descubren una habitación tapiada y el cadáver de una mujer.

La historia de la burguesa y floreciente familia Lax es desgranada por la autora en un entramado en que se entremezclan noticias y datos en tiempo reciente y pasado que en algún momento hacen que el lector no sepa de forma clara en que parte de la historia se encuentra. Una familia italiana desconocida se suma a los hechos y aporta una buena cantidad de cuadros desconocidos que muestran una faceta oculta del pintor.

Las miserias familiares son relatadas con maestría, en la Barcelona de finales del XIX y bien entrado el XX que parece descrita con profusión, sirviendo de base principal a la historia. Unos rumores apuntan a que la abuela Lax se fugó a América con el dueño de los grandes almacenes El Siglo tras su destrucción por un incendio, y otros ensombrecen las figuras de su abuela María del Roser, la matriarca del clan, y su padre, Modesto.

El relato es fresco y dinámico, entremezclando noticias de prensa, relatos, correos electrónicos y descripciones de cuadros que forman en rompecabezas que nos transmite esta historia, que no por ser tremendamente clásica deja de enganchar. Al final, el silencio estalla en voz potente que abre todas las habitaciones, desgranando los secretos y dejando que los personajes y el lector asimilen el trasfondo de esta historia.

1 comentario:

  1. Lo lei hace unos meses y me encantó, la historia está muy bien llevada y tiene una estructura muy original perfectamente enlazada

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