jueves, 18 de octubre de 2012

Play, Javier Ruescas

PLAY es el quinto libro publicado por @javier_ruescas, de tan solo 25 años de edad. Creador de la web de la Saga Crepúsculo, con web propia y fundador y editor de la revista electrónica El templo de las mil puertas, es un elemento muy activo en las redes sociales, donde cuenta con miles de seguidores a los que atiende casi de forma individual, y lo digo por propia experiencia. Esta novela, PLAY, ha visto la luz el pasado 4 de este mes de octubre y el autor se encuentra en estos momentos inmerso en una gira, cual cantante famoso, por toda la geografía española, presentando el libro, manteniendo charlas y coloquios con lectores y blogueros y atendiendo una tras otra entrevistas en medios, especialmente en radios nacionales y locales. Yo supone que no duerme y aun así le debería faltar tiempo para desplegar tanta actividad. Su punto de foco es la literatura juvenil, un público exigente y crítico que hasta el momento le tiene en palmitas, especialmente tras la publicación hace años de la trilogía “Cuentos de Bereth”, una historia mágica de dragones, príncipes y princesas, muy imaginativa y amena, incluso para personas no tan jóvenes.

PLAY está imbricada perfectamente en el mundo actual de los jóvenes y los no tanto. Sus dos protagonistas, masculinos y muy jóvenes, son los hermanos Leo y Aarón, los mayores de una familia con dos hermanas más pequeñas que vive con su madre española, divorciada de un americano que vive en EE.UU., en un pueblo del extrarradio de Madrid. Leo es un “viva la virgen”, que desde muy pronto le ha gustado “ir a su bola” e incluso se ha pasado dos años “por ahí” buscándose la vida y sin que la familia supiera nada de él. En su vuelta a casa tras su última estancia en Nueva York, se da cuenta de las capacidades de su hermano Aarón, en el terreno de la música y la composición. La novia de Aarón se ha hecho actriz famosa y le ha abandonado, lo que lleva a este a caer en “las redes” de su hermano, un “avispado” y “viva la virgen”, que le roba literalmente una serie de canciones compuestas de su ordenador y las cuelga en youtube como si fueran suyas. Las visitas crecen y Leo adquiere una fama inmerecida, llegando a convencer a Aarón para dar un concierto en público haciendo playback. Aarón, tímido y retraído, se deja llevar por su hermano, con más mundo y más “echado para adelante”.

El asunto llega a ser observado por una empresa de producción norteamericana que ficha a ambos a bombo y platillo, y a base de dólares, y se los lleva a Nueva York con la oferta de un futuro de ensueño. Viven en la sede de la empresa y son tutelados en todo lo tutelable por expertos que forjan en ellos todo lo necesario para triunfar. Pero Leo sigue siendo Leo y hace de las suyas, lo que compromete el futuro del “sueño americano” de estos dos jóvenes. Y no se puede contar más sin desvelar demasiados datos que condicionarían al lector.

En principio se trata de una lectura para público juvenil, pero mentiría si, acercándome al horizonte de los sesenta, no confesara que he disfrutado mucho de esta lectura ágil, amena y muy bien escrita, con una secuencia de hechos vertiginosa sin llegar a despeinar y que mantiene la atención de lector con sucedidos sencillos en un ambiente perfectamente plausible hoy en día. Los elementos de la red como youtube, Facebook, Twitter, el correo electrónico … no tienen secretos para el autor, que los maneja con profusión para crear un ambiente que nada dista de la realidad hoy en día de muchos de nosotros, incluso aunque no seamos jóvenes. Los personajes de la novela, además de los protagonistas, están muy bien dibujados y perfilados, llegando a dar una idea justa de la personalidad de cada uno en su contribución a la marcha y desenlace de la novela, que queda abierta para una segunda parte que ya está tomando forma en el disco duro del ordenador de Javier. Los entresijos de las grandes compañías y su efecto en la juventud son tratados con delicadeza pero con valentía, abriéndonos los ojos a posibilidades que en la mayoría de los casos se convierten en realidades pero que también truncan muchos sueños. Es además este relato una exaltación de los valores, del trabajo y del esfuerzo en aras a conseguir una meta, pero que algunas veces se pueden ver mediatizados por “buscavidas” que van a lo suyo y no dudan en aprovecharse del trabajo de los demás, en una sucesión de “corta y pega con cambio de autor” que no siempre es descubierta. Ya disfruté con la lectura de sus cuatro libros anteriores y lo he vuelto a hacer con este más aún si cabe. Y vale perfectamente también para mayores. Mi madre octogenaria lo tiene a la cola.

Y para que el libro en papel tenga algo más, comprado en unos grandes almacenes madrileños viene de regalo con un disco, compuesto de forma espontánea por amigos y lectores de Javier, en el que incluso él mismo ha prestado su voz. Es el "Fenómeno PLAY, tras el que lleva mucha gente desde antes del verano. ¿Hay algo que este chico no haga? ¿o haga mal?.

2 comentarios:

  1. Algo de envidia me dio (mucha) cuando vi su novela en un Vips. :-)

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  2. Había oído hablar de este escritor, joven prodigio creativo, modelo de precocidad e iniciativa, y sobre todo, su tentacular extensión de relaciones en todo tipo de foros y disciplinas. De la profusión de noticias de Javier Ruescas, padecí una insana envidia de la que aún no me he recuperado, pero prometo hacerlo en breve y he incluido en mi “lista” esta obra.

    Pero comento esta entrada, no por el libro, ni por el autor, ni siquiera porque siempre me interesa comentar lo que escribe Angel Luis. Esta vez lo hago para “quitarme el sombrero”, con todas mis respetos, para la madre octogenaria que tiene un libro de estas características a la cola.
    Esto confirma que la vejez no es la aritmética de los años vividos, sino la predisposición a gozar con entusiamo aquellos por vivir.
    Un respetuoso beso a esa bendita y lectora madre.

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