Algunos recordaréis la película A propósito de Henry (Mike Nichols,
1991) en la que Harrison Ford interpreta al personaje Henry Turner, un abogado
al que sólo le interesa el dinero y el
éxito y que por conseguirlos no
tiene miramientos en esconder pruebas o
tergiversar hechos si es necesario. Un día recibe un disparo, y aunque no muere,
sí pierde la memoria. Una vez recuperado tiene que aprender lo desaprendido tras
el accidente, y volver a iniciar la vida donde la dejó, con la curiosidad
prácticamente de un niño y con el asombro de quien va descubriendo que no se siente nada identificado con aquella persona que supuestamente era él. Como
si ese disparo además de la memoria le hubiese volteado la escala de valores a la hora
de afrontar la vida. Su familia que antes estaba en un segundo plano, pasará al
primero, y en el trabajo no se encuentra nada cómodo.
Maldito Karma, de D.Safier Seix Barral, 2009 320 págs. 13,30. Kindle: 9,49. |
¿Por
qué menciono A propósito de Henry
para hablar de Maldito Karma, la
novela de David Safier que ha vendido no sé cuantos millones de ejemplares?
Porque el argumento es prácticamente el mismo, aderezado con el toque de la
reencarnación. Si se fijan en la portada, esos animalillos son Kim Lange en
versión reencarnada. Antes de su primera muerte, Kim era una famosa
presentadora de TV que al igual que Henry Turner, no tenía ningún inconveniente en
pisotear a quien fuera con tal de mantenerse en primera línea. Tampoco le importaba
no disponer de tiempo para estar con su familia. Un día muere y entonces
descubre que ha desperdiciado toda su
vida en tonterías y se ha olvidado de lo importante: su querido marido Alex y
su querida hija Lilly. A partir de ahora, hará todo lo posible por
recuperarles. Para conseguirlo tendrá que ir acumulando buen karma, haciendo
buenas obras y con la compañía de un curioso amigo, Casanova (sí, el famoso
conquistador que nos le encontramos casi al principio de la historia en
estado-hormiga, y del que podremos leer fragmentos de sus Memorias en notas a pie de página). Juntos vivirán aventuras a lo Alvin y las ardillas, y tratarán de ir
subiendo, reencarnación tras reencarnación, en la escala animal, hasta cumplir
sus objetivos.
Maldito Karma da lo que promete, ni más
ni menos: un rato de diversión. Un libro para desconectar de un día ajetreado,
o para reírte un poquito. Lo que me hubiese gustado es que David Safier hubiese trabajado más la verosimilitud y el tratamiento de los personajes.
Porque está bien que circulen este tipo de libros que no tienen más
pretensiones que el entretenimiento, pero unos mínimos no estarían de más.
No llegas a creerte mucho a Kim Lange, una mujer que cada vez que se reencarna
lo hace en animales más “evolucionados”
gracias a sus buenos actos, pero resulta que esos buenos actos están al nivel de
su comportamiento al principio de la historia: para conseguir lo que
quiere se sigue llevando por delante todo lo que haga falta. Si leen el libro,
descubrirán muchas incongruencias de este tipo; la narradora de la historia, que también es Kim, no sabe sólo lo que le pasa a
ella, sino también todo lo que piensan los demás, como si estuviese dentro de
sus cabezas; o parece la Samantha de Embrujada,
en el sentido de que todo lo que quiere, termina consiguiéndolo y prácticamente
al instante, sin justificarse en ningún
momento a qué se debe este poder; por no mencionar lo planos que son los
personajes; lo que no quita que la historia resulte simpaticona, se lea de un tirón -predominan los diálogos que
además fluyen bien, no en vano el autor es también guionista de televisión- y
bueno, a veces el cuerpo te pide más que una historia, una historieta.
Lo
recomiendo para días de playa.
Patricia L.D.
Me habían hablado de la novela, siempre bien.
ResponderEliminarCon tu comentario me he hecho una idea más completa de ella y por tanto será una novela que leeré en verano. :-)
Por cierto, me han entrado ganas de volver a ver "A propósito de Henry". Película fantástica.
Besos,
Consuelo
No sé cómo lo verás Consuelo, pero Kim Lange, la protagonista del libro, nos dice que su marido se parece a Brad Pitt de jovencito. Igual prefieres a Harrison Ford :-) Lo bueno de un libro, a diferencia de una película, es que puedes imaginarte a quien más te apetezca.
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo,
Patricia
¡Harrison Ford! ¡Dónde va a parar!
Eliminar;-)
Jajaja, ya imaginaba que eras más de Harrison Ford... Pues nada, donde dice Brad lees Harrsion :) y solucionado.
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