martes, 2 de abril de 2013

Yo, Robot, Isaac Asimov

Existe otra reseña más antigua de este libro en el blog en el siguiente enlace

Isaac Asimov, de nacionalidad rusa pero residente en los Estados Unidos desde niño, es uno de los autores más conocidos en el género de la ciencia ficción, donde cuenta con innumerables publicaciones entre las que me atrevería a destacar la “Trilogía de la Fundación” y todas sus secuelas y “precuelas”. Autor de numerosos relatos, artículos de divulgación científica, su propia autobiografía en tres tomos, etc. etc. es menos conocido por otras publicaciones importantes entre las que son de destacar una monumental guía de La Biblia, y su “Historia Universal Asimov” donde desgrana en catorce tomos –en la edición que poseemos –la historia de la humanidad desde las primeras civilizaciones hasta el nacimiento de los Estados Unidos. Amén de poseer una cultura descomunal, fue un enorme laborante, lo que explica su vastísima producción literaria.

“Yo, robot” es en realidad un compendio de cuentos, nueve cuentos, todos ellos desarrollados en un futuro cercano, 2035, y que tienen como nexo de unión sus protagonistas y las definiciones y sus consecuencias de las tres Leyes Fundamentales de la Robótica, que deberían ser grabadas en las mentes positrónicas de todos los robots producidos, que se han integrado en la vida cotidiana y se han convertido en gran ayuda para la humanidad a todos los niveles. Susan Calvin, la “robopsicóloga” es una de las protagonistas principales en las nueve historias que forman el libro, estando junto con ella los cosmonautas Donovan y Powell, el enigmático Stephen Byerley, los científicos Peter Bogert, Alfred Lanning, Francis Quinn y, en fin, el personaje narrador de todas las historias, que versan sobre los robots, sus posibles amenazas y sus ventajas incuestionables en la realización de tareas delicadas y/o peligrosas, especialmente fuera de la Tierra.

Este libro supuso el punto de partida de la exitosa carrera literaria de Asimov en el terreno de la ciencia ficción. El autor juega con el presente y el futuro en diferentes posiciones y puntos de vista con respecto a esas máquinas inteligentes que pueden llegar en algún momento a rebelarse contra sus creadores, pero de las que ya no se puede prescindir. Y aunque las normas, las Tres Leyes Fundamentales están perfectamente definidas, proyectos especiales o mentes con otros intereses pueden llegar a fabricar determinadas unidades con propósitos especiales que traspasen la “línea roja” y pongan en circulación unidades con capacidad de saltarse los controles.

El libro se lee con facilidad por tratarse de historias cortas, aunque he de reconocer que puede resultar pesado a personas a las que no las encante especialmente el género. No sería un libro que yo recomendaría para iniciarse en este terreno, existiendo otros de este u otros autores más asequibles y que pueden atraer y motivar más al lector. De este autor recomendaría la “Trilogía de la Fundación”, los tres primeros libros sobre el asunto y de otros autores “El Juego de Ender” de Orson Scott Card o “Huevo del Dragón” de Robert L. Forward.

Pero para quién de verdad esté interesado en el asunto, la recomendación es leer la formidable reseña de Juanlu en este blog titulada “50 Lecturas de Ciencia Ficción y Fantasía” dónde se puede encontrar la información básica que todo iniciado o no iniciado debería conocer y se recomiendan cincuenta libros imprescindibles del género a criterio, muy ajustado, del autor.

Y ya que se han mencionado en repetidas ocasiones en esta entrada, las tres Leyes Fundamentales de la Robótica son:

PRIMERA LEY DE LA ROBÓTICA
Un robot no puede hacer daño a un ser humano o, por su inacción, permitir que un ser humano sufra daño.
SEGUNDA LEY DE LA ROBÓTICA
Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas órdenes entran en conflicto con la Primera ley.
TERCERA LEY DE LA ROBÓTICA
Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la Primera o la Segunda leyes.

2 comentarios:

  1. Hay libros que no están a la altura del público para el que se escribe y otras, como es mi caso, en las que es el propio lector el que desaprovecha la calidad y valía de la obra literaria que tiene entre sus manos.
    Esta novela, todo un icono literario, narra en clave de Ciencia Ficción, la problemática de la inteligencia artificial y la previsible evolución de la interacción entre robótica y la humanidad.
    Un libro estructurado en capítulos, donde tras el disfraz argumental de un artículo periodístico, se narra la primigenia creación, crecimiento y “emancipación” de los robots en un mundo verosímil, en donde, los prototipos creados por el hombre acaban tutelando el mundo ante las carencias físicas y emotivas de los seres humanos, todo ello en órbita a las “tres leyes de la robótica”.
    Un libro, intenso, brillante y árido para los bisoños lectores de este género literario, en donde se plantean cuestiones éticas profundas sobre la libertad de elección, el conflicto entre prioridad de principios, la delegación de responsabilidades, el temor al mundo cibernético y la inmersión de la humanidad en una aceleración tecnológica imparable, cuyas consecuencias se aventuran en la novela.
    Sin embargo, yo me he aburrido entre sus páginas, incapaz de alcanzar el ritmo narrativo, dada la novedad de la jerga científica de mi admirado Asimov y mi ineficaz predisposición.
    Pese al acercamiento entusiasta hacia el libro, desde un principio me fui dispersando, y lo he acabado en un calendario de lenta lectura, tras la cual, presumo no haber llegado a la esencia de su contenido. Muestra del interés de "Yo, Robot", son los comentarios entusiastas de mis compañeros del Club de Lectura, ansiosos por participar en el debate para transmitirnos su empática admiración por la obra, su contexto y postulados. Me quedo, de entre todos ellos, el comentario de una las compañeras, que se entrenecía al contarnos como leía la novela junto a su hijo de diez años, quien con lágrimas en los ojos, criticaba lo que escuchaba de labios de su madre, acusando de insensibilidad a los seres humanos por ser tan crueles con los robots. Sólo por escuchar este comentario mereció la pensa leer el libro y asistir a la reunión.

    Recomiendo este libro a cualquier persona que quiera disfrutar de un producto narrativo inteligente, emotivo y de plena actualidad pese al largo medio siglo desde su publicación.-
    Un Abrazo.

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  2. Muchas gracias por esta nueva entrada. Es un placer para mí volver a ver un comentario de mi escritor favorito y de uno de mis 10 libros preferidos, el que más veces he leído junto al "Conde de Montecristo" y "El Hobbit".

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