viernes, 28 de enero de 2022

La Ley Perpetua. Fundamentos de una utopía, de Joaquín González-Herrero

 Entrada actualizada en noviembre de 2023 por la publicación de la Segunda Edición

Joaquín González-Herrero nació en Segovia en 1958, hijo del abogado e historiador Manuel González Herrero. Doctor en Derecho con premio extraordinario por la Universidad Complutense de Madrid, ingresó en la carrera fiscal en 1985. Ha desarrollado su vida profesional en el extranjero durante más de 20 años y, de vuelta a España, ejerce como fiscal de la Audiencia Nacional. Además de sus producciones discográficas como dulzainero —discípulo del folclorista Agapito Marazuela—, es autor de numerosos libros y producciones jurídicas, artículos periodísticos y obras sobre materias diversas. En 2009 publicó en la editorial Endymion el poemario «Memoria de la ausencia», en recuerdo de sus dos abuelos, inmolados en el sangriento verano de 1936. En 2011 dio a la imprenta «Cartas desde Bruselas», relación de crónicas costumbristas, en la misma editorial. En 2014 apareció el poema épico en 1300 versos de inspiración miltoniana «Negro sobre rojo», también en Endymion. En 2017 presentó su obra «Segovia en verso», editada por la Diputación Provincial de esta provincia. Acaba de aparecer, en la editorial citada, «La otra aurora», ensayo novelado, o relato de ficción, en que la imaginación corre las cortinas del futuro para mostrar el escenario del drama de la humanidad. Vive en Segovia, desde donde dirige su mirada a la sierra de Guadarrama y la campiña segoviana, entre mieses, pinares y viñedos. Busca en sus rincones las respuestas, en la senda del baqueano. [Texto recogido de la solapa del propio libro].

Constituye el objeto principal de esta obra la Ley Perpetua, uno de los documentos históricos más importantes de nuestra Historia Moderna. Alumbrada en pleno fulgor revolucionario, se trata del texto precursor del constitucionalismo en Occidente y símbolo de la Guerra de las Comunidades.

«Resulta sorprendente que el excepcional documento —Ley Perpetua, de Ávila o de Castilla—apenas sea conocido, incluso en nuestras universidades». El libro está enfocado en un texto que encontraremos completo en uno de los apéndices del libro y que nos convendría leer con detenimiento para atisbar el alcance enorme que tenía (en aquella época de los albores del siglo XVI). El autor se plantea numerosas cuestiones, que desarrolla, y las causas que llevaron a tal extremo a un pueblo compuesto por personas que «podríamos llamar —con terminología moderna—profesionales, licenciados, bachilleres, boticarios, bordadores, sastres (burguesía urbana)». Y ahonda también en los planteamientos y el alcance que querían obtener que no era el derrocamiento del Rey sino mejorar las condiciones de vida controlando el poder del rey y los nobles. Las consecuencias inmediatas son de todos conocidas —Villalar y el ajusticiamiento de los líderes— pero quedan muchas reflexiones que hoy en día —quinientos años después— nos deberían incitar a pensar que estamos viviendo realidades que ya se quisieron solucionar —no se pudo cumplir el sueño— mucho tiempo atrás.

Muy al contrario, la Guerra de las Comunidades, como primera revolución burguesa moderna en Europa, tuvo una dimensión nacional. Sus consecuencias afectarán de manera inevitable a los reinos de España, Y su sombra, demasiado alargada, llegará hasta nuestros días.

La dramática derrota de Villalar de 23 de abril de 1521 es uno de los acontecimientos más tristes de la Historia de España. Supuso el final de un sueño, la temprana utopía de pretender someter el poder real a la ley, a la razón y a la justicia. Traza sin duda la frontera entre el ayer medieval y el mañana de la modernidad que no fue.

Se ha dado la circunstancia, que no casualidad por estarse celebrando el V centenario, de coincidir la publicación de este libro con el magnífico curso monográfico titulado «V Centenario de la guerra de las comunidades», que versa sobre estos hechos históricos y que se está celebrando en la Universidad Carlos III de Madrid bajo la batuta del magnífico historiador Eduardo Juárez Valero. Una de las clases, celebrada el lunes pasado, ha consistido en trabajar sobre este documento y llegar a la consideración, igual que el autor del libro, de que estamos muy posiblemente ante la primera Constitución del Mundo, que incluso ilustró de forma reconocida la Constitución de Estados Unidos que vio la luz en 1787, más de 250 años después, y, significativo, mucho antes que la francesa. Los españoles llevamos quinientos años con reformitas y seguimos teniendo nuestra revolución pendiente: bien podría haber sido esta de los Comuneros si hubieran llegado a forzar la anuencia del Rey. Un libro muy recomendable, por sus numerosas cuestiones resueltas por la opinión que se me antoja muy autorizada del autor refrendada con las explicaciones del profesor. El libro, agotado en esos momentos de enero de 2022, ha sido patrocinado por el Ayuntamiento del segoviano pueblo de Martín Muñoz de las Posadas, donde se cuajaron los primeros borradores de esta Ley Perpetua en el otoño de 1520. Lamentablemente la Comunidad de Castilla y León celebra su Día de la Autonomía conmemorando un luctuoso suceso como fue el ajusticiamiento de Bravo, Padilla y Maldonado y además en el día inexacto, dejando pasar la oportunidad de lo que debería ser una celebración a nivel Nacional, pues prácticamente todas las ciudades de aquella todavía no-España se levantaron. Libro que es una lección de Historia, con mayúsculas, y que hará las delicias de los amantes de la misma al acceder al conocimiento de unos hechos que pudieron ser trascendentes, pero quedaron en el olvido sepultados por los vencedores… «con la consagración de una monarquía centralista y autoritaria, que continuaría con su sucesor, Felipe II».

Y llegando hasta nuestros días…              

La Guerra de las Comunidades, como primera revolución burguesa moderna en Europa, tuvo una dimensión nacional. Sus consecuencias afectarán de manera inevitable a los reinos de España. Y la sombra de la derrota, densa y alargada, se llegará hasta nuestros días.

Fieles a la idea de Linneo según la cual natura «non facit saltum», los gestores de la llamada Transición solo supieron prolongar cuanto conocieron, pero por otros medios: una democracia liberal, aún con el lastre del pasado. No fue aquello una ruptura, como ocurrió en Portugal en 1974. …  Bajo el fantasma de la Guerra Civil y deseosos de enterrar recuerdos y culpas del ayer —y ello pese al indulto general de 1975 y la amnistía de 1977— se inició el proceso político que, pese a deslumbrar a Europa, no fue sino una suma de luces y sombras.

Comentario añadido en noviembre de 2023 con motivo de la publicación de la Segunda Edición

La primera edición de esta obra se agotó en breve tiempo y hemos tenido que esperar casi dos años para disponer de esta segunda edición, corregida y (muy) aumentada. El autor aporta nuevos fondos que se suponían perdidos y que han sido encontrados en el Archivo de Simancas y sobre todo una versión inédita de los Capítulos del Reino, hallada en la Biblioteca Nacional, reproducida en esta segunda edición y transcrita íntegramente por el historiador Eduardo Juárez Valero. Este historiador complementa la edición con un esclarecedor epílogo que conducirá al lector a conocer más en profundidad este ignorado por lo general asunto de la Guerra de las Comunidades y la Ley Perpetua de Castilla.


 

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