Susana Martín Gijón, nacida en Sevilla en 1981, es licenciada en Derecho y especialista en relaciones internacionales y derechos humanos. Tras desarrollarse profesionalmente en la empresa privada en Italia, trabajó en la administración autonómica extremeña en temas de desarrollo socioeconómico, derecho del consumo y cooperación internacional, siendo Directora General del Instituto de la Juventud de Extremadura durante cuatro años. Colabora en diversas plataformas nacionales e internacionales, entre ellas, la Asociación por la Igualdad de Género en la Cultura Clásicas y Modernas y la Red de Mujeres Jóvenes Africanas y Españolas. En paralelo a su actividad profesional desarrolla su faceta de escritora con numerosas obras publicadas, algunas de ella trilogías como esta que hoy nos ocupa o las de «Annika y Susana» o «Del trébol», amén de obras sueltas por las que ha obtenido algunos premios de relevancia. En 2019 fue elegida presidenta de la Asociación de escritores extremeños.
La saga se desarrolla en Sevilla, aunque con algunas conexiones internacionales. La protagonista principal, Camino Vargas, es jefa accidental —su jefe Paco Arenas ha sido tiroteado— del Grupo de Homicidios en la ciudad donde cuenta con un equipo variado de colaboradores. «Progenie», primera de la serie se publicó en 2019 y obtuvo un gran éxito entre el público. En pleno verano, bajo un calor asfixiante en Sevilla, una mujer aparece muerta habiendo sido atropellada pero el asesino le ha colocado un chupete en la boca. La autopsia determinará que estaba embarazada pero los asesinatos de otras mujeres empiezan a sucederse… En 2021 se publica la segunda novela de la trilogía, «Especie»: un hombre desollado, otro molido a palos y otro inflado de comida hasta reventar comienzan a aparecer en lugares significativos de la ciudad de Sevilla. Otro misterioso asesino en serie del que la novata del grupo Evita Gallego consigue detectar su modus operandi, con conexiones internacionales. Y en 2022 aparece la tercera novela de la saga, «Planeta», con conexiones con la anterior, el cuerpo de una mujer a la que le han cortado los pies aparece en medio de un campo de golf. La ciudad de Sevilla sufre una lluvia constante con inundaciones no siempre con causas naturales. Hay más asesinatos, no solo en Sevilla, que parecen estar conectados por lo que todos los componentes de la brigada se verán inmersos en una carrera contrarreloj para salvar a la población de un grave peligro.
No soy muy de novelas negras pero la recomendación de la segunda novela de la serie por un tuitero cántabro —@JAVIERCASTRO96— al que sigo me hizo acercarme a esta autora. El verano es una buena oportunidad para leer novelas desenfadadas y entretenidas y desde luego estas tres se leen de un tirón porque mantienen la intriga desde el principio. Se pueden leer por separado pero el personaje de la inspectora queda mucho más redondo leyendo desde el principio. También los personajes de los colaboradores de la inspectora y de su antiguo jefe tienen sus resplandores, que relucen en las novelas y conforman un elenco muy bien trabajado y conseguido. Los planteamientos de los crímenes y de sus autores y los giros que van tomando los acontecimientos tendrán al lector muy entretenido y con una cierta ansiedad por saber los desenlaces. Bien escritas, documentadas en los aspectos técnicos que sirven de base a los crímenes y con personajes carismáticos muy conseguidos en sus psicologías no solo profesionales como policías sino también familiares y personales, son una buena recomendación para aquellos que gusten de la novela negra. Novelas con una cierta extensión en cuanto a páginas y vocablos, unas horas de distracción con una lectura ágil.
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