En esta novela Stephen King deja un poco de lado el género del terror al que nos tenía acostumbrados y nos introduce en un viaje en el tiempo, al pasado, a una América donde Elvis Presley y la guerra fría dominan el ambiente y el racismo sigue latente. Jack Epping es un profesor de instituto que da clases nocturnas de inglés para mayores. Uno de los ellos, Harry, le entrega una redacción en la que cuenta como cambió su vida cuando siendo un niño su padre asesinó a su madre y sus hermanos a golpes de una maza y a él le dejó lisiado de por vida. Este relato impacta al profesor, al tiempo que recibe una extraña llamada del dueño de un bar al que suele ir, Al Templeton, que está gravemente enfermo y le pide su ayuda para una misión que él no podría completar: impedir el asesinato de John F. Kennedy el 22/11/63. En la despensa del bar existe un agujero intertemporal que le lleva a un momento y lugar concreto en Maine en 1958 y, a pesar de su incredulidad, Jack se deja convencer para hacer ese viaje comprobando que realmente existe esa burbuja en el tiempo. Accede a ayudarle pensando en evitar la tragedia de Harry, lo que a su vez le serviría como experiencia para intentar impedir la muerte de Kennedy, pero el pasado se resiste a ser cambiado y aun en el caso de hacerlo las consecuencias en el futuro serán imprevisibles.
A pesar de que sospeches lo que va a pasar y muchas veces sucede como pensabas, no deja de sorprenderte. En ciertos pasajes del libro me recordaba a Hitchcock cuando decía (más o menos) que el suspense no consiste en que suceda algo inesperado sino que sepas que va a suceder, pero no cuando. La descripción de los personajes especialmente de Lee Oswald es extraordinaria así como lo detalladamente que construye cada escena para que nada desentone y como nos inspira los olores y sabores olvidados por el paso del tiempo. Por el contrario, también ha habido capítulos en que se me ha algo hecho pesada y la descripción de esa época dorada de los 50 y 60 llega a ser a veces repetitiva y monótona, pero a partir de la mitad de libro empieza a coger un ritmo trepidante hasta un final que me ha gustado, a pesar de no ser el que yo esperaba, o precisamente por eso.
Dice el autor en las notas al final del libro que pensó en escribirlo en 1972 pero no había podido terminarlo hasta ahora por falta de tiempo para documentarse. Entre medias escribió "La Torre Oscura" estupenda serie que comparte algunos argumentos con esta novela aunque en un ambiente completamente distinto. Yo creía que "La Torre" había sido la inspiración para "22/11/63" y posiblemente haya sido al revés. En cuanto a su calidad, hay opiniones para todos los gustos. Hay quien piensa que es lo mejor de King y otros que es "La Cúpula" (no la he leído). Reconozco que he "disfrutado" mucho con Stephen King en el pasado y recuerdo con "IT" o "Cementerio de animales" haber sentido auténticos escalofríos, lo que es muy difícil de lograr sólamente leyendo. Tengo muy reciente "La Torre Oscura" que me encantó y ese es su problema, que "22/11/63" es muy buena pero no llega a su nivel por lo que no puedo darle más de un 3.