Esteban Navarro Soriano, escritor murciano, nacido en Moratalla en 1965 que durante muchos años ejerció de policía nacional destinado en Huesca con lo que obtuvo numerosas ideas y situaciones para sus libros, bien por experiencias propias bien referidas por compañeros, a las que añade mucho de imaginación para convertirlas en historias redondas. Hace algunos años fue el primero en acuñar la expresión «generación Kindle» para designar a los autores que aprovechaban la facilidad de la auto publicación y del fenómeno de los libros electrónicos para hacerse un hueco en el panorama literario. En la actualidad, enero de 2024, es ya escritor a «tiempo completo» y cuenta con una treintena de libros publicados, numerosos premios en diferentes certámenes y participa activamente en actos relacionados con su obra. Algunos de sus libros ya han sido reseñado en este blog —pueden localizarse utilizando el buscador— como «El apagón», «La noche de los peones», «Ángeles de granito», «La gárgola de Otín», «El cónsul infiltrado», «Una historia de policías», «La rubia del Tívoli», «El ajedrecista», «Natasha», «Verdugos» o «El altruista». El libro que hoy comentamos, «Baco» es auto publicado por el autor en formato digital, tapa blanda y tapa dura, y puede pedirse —como los demás— directamente al mismo mediante un correo electrónico a EstebanNS@icloud.com para recibirlo dedicado por el autor. Más información en su blog accesible desde este enlace o en su página de autor de Amazon.
La acción central transcurre trepidante en menos de una semana. Un conductor es asesinado en un semáforo de Barcelona de un certero disparo por un motorista. Un inmigrante es detenido al pillarle la policía tratando de robar la moto en la que estaba el arma utilizada, una Beretta 92FS. Algún tiempo más tarde, se produce otro asesinato en una casa de Jaca y cuando llega la policía encuentra en la escena del crimen a otro inmigrante, estando el arma empleada en una mesa. Drago, abogado de Huesca que se dedica a asistir de oficio a detenidos, es llamado para ocuparse de este caso. Desde el primer momento se da cuenta que el inmigrante es incapaz de matar una mosca y le han tendido una trampa muy elaborada. En contra de todo y todos, se toma interés por el caso y acabará inmerso en una trama con otros asesinatos que nadie ha relacionado pero que apuntan a hechos ocurridos en el pasado. Las víctimas, menos una, tenían el mismo tatuaje en diferentes partes del cuerpo: una copa de vino inclinada con la palabra «Baco».
Hay una relación en todo y todo está relacionado. Nada es casual, el azar no existe. Todo tiene un motivo, aunque sea rebuscado.…
Un relato palpitante en que la acción es continua y no deja respiro al lector, que verá como los hechos se van sucediendo a toda velocidad con giros continuos e inesperados según las pruebas que va descubriendo el protagonista, el abogado de oficio Drago en sus pesquisas por Barcelona y algunos pueblos de la provincia, llegando incluso a ser agredido por un misterioso personaje. Unos diálogos muy logrados imprimen dinamismo a la acción ambientada de la forma que nos tiene acostumbrados este autor y que aportan viveza a las escenas que sin duda el lector construirá. Relato verosímil que bien pudiera ser llevado al cine o a una serie de las que proliferan en el mundo actual.
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