@JuanGomezJurado Desde ayer está en las librerías y desde hoy en los mundos digitales la nueva novela «el Paciente», la «e» minúscula y la «P» mayúscula intencionadamente, de Juan Gómez-Jurado, un autor más consagrado allende nuestras fronteras que aquende, si bien la tendencia seguramente forzará el cambio que ya iniciara con su anterior libro «La leyenda del ladrón», una novela con tintes históricos de la que se han vendido más de cien mil ejemplares hasta el momento y cuya reseña en este blog puede verse en este enlace. Los derechos del libro han sido vendidos a más de 40 países y un proyecto de película está igualmente en marcha. Otros libros del autor y que se han reseñado en este blog son «Contrato con Dios», «El espía de Dios» y «El emblema del traidor». Juan es una persona que participa muy activamente en las redes sociales y es claro defensor de las nuevas tecnologías en el mundo del libro como ya demostró con su campaña «1 libro – 1 euro» en la que sentaba las bases de lo que el entendía por el desarrollo del mercado del libro digital, manteniendo más que palabras con un “conocido cantante” y consiguiendo hacer llegar en pocos días varias decenas de miles de euros a “Save the Children” a cambio de la descarga gratuita de los tres libros que tenía publicados en aquella época. Libros que por cierto están disponibles en edición digital en unos precios más que asequibles, casi irrisorios para la calidad de los mismos. También podemos ver artículos suyos en diarios como ABC o revistas como Muy Interesante.
Intentar hacer una sinopsis del libro sería acabar con la magia que contiene. El doctor Dave o David Evans es un eminente neurocirujano que nos habla en primera persona desde el corredor de la muerte donde se encuentra, a punto de cumplir los cinco años allí. Desde un primer momento nos dice que… «No soy un terrorista, ni un loco, ni un asesino. Solo soy un padre». Su relato se retrotrae a los hechos que le han llevado a esa situación cuando, presionado por un grupo de desalmados muy bien entrenados, tuvo que decidir si salvar la vida de su hija de siete años a cambio de dejar morir en la mesa de operaciones a su próximo paciente. Solo que ese paciente no era cualquier Paciente: nada menos que el presidente de los Estados Unidos. ¿Y si hubiera sido Mariano? es broma. Dave era recientemente viudo en el momento de los hechos, trabajando en el hospital durante muchas horas lo que suponía un cierto «abandono» de su hija Julia y que ya ocurriera anteriormente con su esposa Rachel. Y es que no se puede decir nada más a riesgo de matar la trama desvelando cosas ciertas o sugerencias engañosas a quien lee estas líneas.
Si algún familiar o amigo --el oso-- adquiere el libro --la miel--, aplícate el dicho contenido en sus líneas: «Nunca te interpongas entre el oso y su miel». Utilizar la palabra adictivo para referirse al texto, 480 páginas o 106.707 vocablos, sería quedarse muy corto. La palabra de referencia que ahora se menciona mucho es que «engancha», pero yo creo que va más allá: te deja las manos materialmente pegadas al libro sin poderlas separar y tu cabeza no piensa en otra cosa que no sea avanzar en la lectura e ir descubriendo una sucesión de hechos en una acción trepidante, narrada con la maestría lingüística de este autor que utiliza las palabras justas en los momentos adecuados para mantener al lector en ascuas. Y no faltan sus guiños a lo cómico con frases como «este asunto es más secreto que el color de los calzoncillos del papa Francisco» o «estaría presumiendo delante de sus amigas de que le había visto el pájaro al Presidente». Pero también se aprenden cosas como cuando nos refiere detalles como que «Por suerte, tenía copias digitales de todas nuestras fotos en Dropbox. Al menos eso pudimos salvarlo».
No siendo muy aficionado a la lectura de «thriller», me he devorado este en poco más de cuatro horas y media. Pero esto es como una película de la que sabes el final, en la que todo sucede a velocidad de vértigo, y en la que cuando llega el fin compruebas que lo que parece, simplemente, no es. En el trasfondo de todo este relato que pudiera parecer frío, los personajes, con mucha profundidad y recorrido, nos dejan asistir a sus emociones y sus anhelos. Como ya es frecuente en este autor, se pueden extraer paralelismos con la vida real en los diferentes mundos por los que transita el desarrollo de la acción: relaciones familiares, laborales, el mundo de la sanidad, la policía y los servicios secretos. Yo cuando sea mayor no podré ser un buen neurocirujano como Dave pero me gustaría tener bien claros mis planteamientos como los tiene él, lo mismo cuando trata a un simple pandillero como a la primera dama de la nación. ¡Olé sus narices! Como nos dice, «huyamos de ser unos "perdónpero", ese grupo de personas que jamás se disculpan por sus acciones».
Esperemos ver pronto este libro en una película. No me la perderé por nada del mundo y estaré ansioso por ver cómo se resuelve en ella la «puesta en su sitio» que Dave infringe a MaKenna, el todopoderoso jefe de seguridad del presidente que es nombrado en 62 ocasiones a lo largo del libro. Al menos en la lectura es memorable. Decía Pepu Hernández algo así como que «lo bueno es recorrer el camino, que cuando llegas a la meta se olvida todo y se empieza una nueva andadura». Habrá que esperar a que nos sorprenda Juan Gómez-Jurado para iniciar un nuevo camino, una nueva lectura… ¿sobre qué?
Hasta ahora he leído todo lo que ha publicado Juan Gómez-Jurado y todas las novelas me han gustado, especialmente "La leyenda". Seguro que ésta no me defrauda a la vista de tus comentarios. Solo tengo que hacerle un hueco... que es lo complicado.
ResponderEliminarNo he leído nada de este escritor todavía,pero este me llama la atención, porque me encantan los thrillers.
ResponderEliminarBesos!
Pues merece la pena este autor. Novelas cimentadas en una estructura perfecta a las que se les percibe un trabajo previo de investigación enorme.
ResponderEliminarPero lo más plausible es la calidad literaria de la prosa, ortodoxa y accecible.
Por desgracia tengo llena la agenda para las lecturas de este año. Pero cuando encuentre un hueco seguro que la leo.
Un abrazo.
Gracias por tus valiosos comentarios sobre esta obra. Si ya antes tenía ganas de leerla, ahora la intriga es aún mayor. Creo que será el próximo libro que lea.Seguro que su lectura me engancha y no me defrauda. Me gusta Juan Gómez Jurado porque sus obras te atrapan y tanto la trama como el estilo literario son fascinantes.
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