Disponible desde el pasado jueves 24 de octubre en librerías y mundos digitales la nueva entrega de la serie de Antonia Scott y Jon Gutiérrez, «Loba negra», de Juan Gómez-Jurado, un autor más consagrado allende nuestras fronteras que aquende, si bien la tendencia tiene todos los visos de irse invirtiendo gracias a sus últimas novelas y las ingeniosas e intensas campañas llevadas a cabo en las redes sociales. Otros libros de este autor, todos menos los infantiles que también tiene, están reseñados en este blog amén de algunos encuentros personales con él, por lo que invitamos al lector a usar el buscador del blog. Juan, escritor, periodista y buena gente, colabora tan intensamente con medios escritos, radiofónicos e internautas que nadie sabe de dónde saca tiempo para escribir. De nuevo hay que destacar el compromiso del autor con las nuevas tecnologías desde aquel lejano 15 de enero de 2011 con su campaña «1 libro = 1 euro» siendo otra prueba más de ello este libro en su versión (ebook) digital: 4,74 euros, menos de lo que cuesta un gin-tonic y mucho más paladeable y durante más tiempo. Sigue habiendo gente para todo y habrá quién lo descargue de alguna web donde ya ha hecho su aparición. Más información en la página web personal del autor accesible desde este enlace, donde todavía no ha tenido tiempo de actualizar «Loba negra» a esta fecha (esperamos y deseamos que este comentario se quede anticuado cuanto antes).
Aunque no es estrictamente necesario, si es muy recomendable haber leído «Reina Roja», primer libro en el que aparecen Antonia Scott y Jon Gutiérrez para tener una idea de sus personalidades. En el aspecto de la sinopsis del libro y como ya ocurriera con el anterior, la mejor es la que no se hace, para no desvelar los innumerables trasfondos que van apareciendo en cada vuelta de página, donde nada es lo que parece, por mucho que el lector se las dé de «listo» tratando de adivinar el desarrollo de la acción y sus personajes. El propio autor, en su twitter, ruega a los escribidores de comentarios y reseñas que no revelen nada ni siquiera avisando de que se va a hacer «spoiler»: «Un humilde y pequeño favor, para los de Kindle: si cuando acabéis y tengáis un hueco ponéis una reseña con el título: “No leas las reseñas, spoilers”, os lo agradezco muchísimo. Y por favor, no mencionéis ningún detalle de la trama más allá de la pág. 50». Sus deseos son órdenes para nosotros y el que quiera saber de qué va tendrá que leerlo.
Tras el enorme éxito de «Reina Roja» hace ahora un año, una historia que llevaba (muchos) años en gestación, a buen seguro que miles de lectores, entre ellos yo, han pospuesto sus lecturas en curso para acometer «Loba negra» con el riesgo ya asumido de que no se puede parar y si se dispone tiempo no se hará otra cosa hasta concluir las 552 páginas o los 101.729 vocablos que meterán al lector en un espiral de situaciones cambiantes que harán peligrar sus uñas. Diálogos chispeantes y ocurrentes, comentarios ad hoc que provocan la complicidad, situaciones muy bien estudiadas que parece que no vienen a cuento y que van cuadrando a medida que se avanza en la lectura. Se sigue armando la psicología de Antonia y Jon, coincidentes laborales y nada más, que a buen seguro seguirán teniendo recorrido en posteriores entregas. Como ya decíamos con «Reina Roja», el lector quedará esposado, —perdón, engrilletado— materialmente al libro para no soltarlo hasta acabar. O si deja el libro, lo que no aconsejamos salvo caso de fuerza mayor, quedará en ascuas hasta que pueda continuar la lectura. Y cuando acabe, a esperar ansiosamente el siguiente. Aunque como ya he comentado con anterioridad no soy aficionado a este género, los libros de Juan Gómez-Jurado me trascienden y no me ando con remilgos. Los he leído todos, muchos de ellos de un tirón el día que han salido, cosa que, lamentablemente no he podido hacer con este por cuestiones personales, demorando su lectura tres días… ¡una enormidad de tiempo!