José de Sousa Saramago nació en Portugal, Azinhaga, en 1922. Escritor, novelista, poeta, periodista y dramaturgo portugués laboró en diversos oficios manuales (cerrajero, mecánico…) antes de dedicarse a la literatura, siendo en 1947 cuando publicó su primera novela, «Tierra de pecado», tras la cual estuvo en silencio literario durante veinte años. Es a principios de los años 80 del siglo XX cuando se convierte en un autor de culto que traspasa fronteras y es admirado y premiado con numerosos galardones internacionales que culminaron en 1988 con el Premio Nobel de Literatura. Autor de una extensa bibliografía, plasmó en sus «Cuadernos de Lanzarote» su amor por la isla canaria donde residía largas temporadas y en la que falleció en 2010.
Un conductor parado ante un semáforo en rojo se queda sin visión de forma súbita. Ve una claridad blanca que se expande de manera fulminante por la ciudadanía sin saber a ciencia cierta de qué forma. La alarma social cunde en los primeros momentos y el gobierno decide internar a los detectados y posibles contagiados en una cuarentena ignominiosa en un manicomio abandonado custodiado por militares con la orden de disparar a matar si intentan salir. El número de afectados crece sin cesar y la vida en el manicomio se hace insostenible porque aflora lo peor de la condición humana para tratar de sobrevivir a cualquier precio. Una de las primeras ciegas en llegar guarda un gran secreto que sabrá explotar a lo largo del tiempo para ayudar a un pequeño grupo de ellos entre los que se encuentra su marido, precisamente médico oftalmólogo y uno de los primeros en contagiarse de esa «ceguera blanca». Toda la población se contagiará de forma rápida, lo que aborta la cuarentena y les permitirá salir a un mundo en el que la supervivencia es prácticamente imposible. El grupo comandado por la «ciega especial» conseguirá ir teniendo una vida con algo de dignidad hasta que…
Ablandados por la lluvia, los excrementos, aquí y allá, moteaban la calle…
Impresionante relato de este conocido autor que impactará al lector desde el primer momento por sus interminables párrafos y sus giros gramaticales. Ni un solo nombre en los personajes: la protagonista, esa ciega especial, será identificada como «la mujer del médico» y referenciada 369 veces a lo largo del libro. Otros personajes son «el médico», «la chica de las gafas oscuras», «el niño estrábico» o «el viejo de la venda negra» entre otros muchos sin olvidar al tardío «perro de las lágrimas». El autor construye un mundo ficticio, lleno de imaginación e ironía, donde dar cabida a las pasiones humanas y los comportamientos más abyectos en la lucha por la supervivencia. Original desde el primer párrafo, quizá algo repetitivo y machacón, mantiene en vilo al lector de principio a fin y le hace ponerse en el lugar de los «actores» para reflexionar sobre numerosas cuestiones que nunca el lector se habrá planteado. Ha sido mi Club de Lectura y su directora, a la que doy mi más efusivas gracias por propiciar mi acercamiento a esta maravilla de (sorprendente) libro y de (magnífico) autor. Existe una película basada en este libro de 2008 titulada «A Ciegas»
La mujer del médico se levantó, se acercó a la ventana. Miró hacia abajo, a la calle cubierta de basura, a las personas que gritaban y cantaban. Luego alzó la cabeza al cielo y lo vio todo blanco…
Pues si tienes un ratito tienes que leerte La caverna, y Todos los nombres. Es uno de mis autores favoritos. Me alegra que te haya gustado conocer a Saramago.
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